Hola amiges.
Lo de hoy, ha terminado en que nos hemos ido antes. Los docentes siempre tenemos un plan B pero el estado de cabreo que me ha causado el personaje del Excelentísimo Ayuntamiento de Valderrubio ya no me ha dejado concentrarme. Estuve ayer como un idiota preparando la clase de hoy, gastando mi tiempo libre en intentar enseñaros con mayor o menor fortuna. Pero resulta que es que la maquinita era muy necesaria hoy en la casa de García Lorca. No lo dudo. Quizás alguien ha preparado una presentación con poemas lorquianos y música de las entrañas del Sacromonte, un espectáculo de imagen y sonido que a los que lo hayan presenciado les ha estremecido y han captado la esencia atormentada del alma del poeta y han corrido esta tarde a comprar algunos ejemplares de sus libros. O puede que no. Puede que fuese solo para una pollada. Me da igual. El caso es que supongo que lo sabian desde la semana pasada como poco. Y nadie nos dijo nada ni nos avisó ni pollas. En la tónica de amabilidad y buen rollo que se respira por aquellas dependencias. Bueno, tampoco pasaría nada si no hubiese tenido que aguantar del paisano de Federico (del que no sé ni su nombre ni el importante cargo que ocupa , ya que aquella costumbre de presentarse cordialmente está un poco en desuso) la especie de bronca por estar utilizando el proyector. Vamos, que parecía que lo hubiese pagado él, o su Alcalde querido o sus concejales de su propio bolsillo. Me da más en la nariz, aunque puedo equivocarme, que lo han pagado unos currantes de Munich o Berlin con los impuestos del sudor de su trabajo. Pero el tipo hablaba como si fuese parte del ajuar de su boda. Y el buen señor nos critica a la monitora del otro curso y a mí por no dejarlo siempre en el mismo sitio, y que pierde mucho de su valiosísimo tiempo de servicio público en localizarlo. Vamos, que o está en un aula o en la otra, a cinco metros, y si se queda en una u otra según quien lo haya usado es porque el aparatito necesita enfriarse antes de moverlo, por aquello de que la bombilla se funde con ná y cuesta una pasta. Pero para eso hay que saber un poquito de nuevas tecnologías. Aparte de amar con toda su alma ese proyector el buen señor debiera saber un poquito sobre él, si de verdad lo quisiese tanto. A lo mejor solo cumplía ordenes de sus superiores. El caso es que he tenido que aguantar toda una muestra de mala follá granaina que se podría resumir en "os jodéis que nos lo hemos llevado, y agradecidos debiérais estar de utilizar el aula y demás porque es de Valderrubio y sus ciudadanos". Ole, ole y ole. Creo que en la guía Michelin, Valderrubio tiene unas pocas de páginas. A lo mejor alguno de vosotros se dedica a esto del turismo y organiza una ruta que sale de Colomera, pasa por el pantano del Cubillas, sigue por la cara norte de Sierra Elvira, sube a los Tres Juanes y sus impresionantes vistas, baja a las aguas termales de Pinos Puente, atraviesa la vega y acaba en la casa de Lorca de Valderrubio, en donde buscáis un buen mesón para comer y los clientes se dejan el dinerillo. Pero la verdad, después de lo de hoy, las ganas de enseñaros como sacar del ostracismo y el olvido ese pedazo de la provincia de Granada se me han quitado un poco.
La idiosincrasia de un pueblo y los tópicos suelen ir asociados. Pero a veces explican cosas. Granada es de las últimas (si no la última) provincia de España en PIB, desarrollo y esas cosas. Y tenemos la Alhambra, Sierra Nevada, la Costa y el museo más visitado de Andalucía, que es el Parque de las Ciencias. Si no las tuviéramos no sé dónde estaríamos.
Gracias señor desconocido por recordarnos por qué estamos donde estamos y somos quien somos.
Saludes a todes.
P.D.: Estrella querida y otras buenas gentes de Valderrubio. Hay un abismo entre vosotres y ese señor, no os sintáis aludidas, pero tarea os queda con ese paisanaje. Suerte.
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