Lo mejor de todo fue ver a Toñi después del concierto. Cuando menos confianza tenía en el blog, Toñi va y aparece gracias precisamente al blog. Sin saberlo, le hizo un homenaje a mi relato gracias al bonito sombrero que llevaba puesto. Imaginen a un hombre caminando sin rumbo fijo por calles infinitas. Aquella noche llovía y la ciudad era inmensa. Un hombre con un sombrero y un maletín, etcétera. Al asistir, Toñi se llevó consigo a todos nuestros compañeros de Valderrubio y mi presentación fue como un ejercicio más de clase, donde la exigencia era sin duda superior a la del público del auditorio Medina Elvira de Atarfe. Muchas gracias, Toñi. Es como si el curso siguiera latiendo entre nosotros.
Un abrazo y Feliz Navidad a todos.
Antonio Romera
Sierra Elvira. Diciembre del año 2011. Domingo 25.
No hay comentarios:
Publicar un comentario